5.2.2 El partido liberal como generador de campañas
En las siguientes
páginas desarrollaré lo que podría ser un modelo de partido liberal que,
compatible con los ya existentes, pueda influir en la agenda política a favor
de las ideas aquí representadas. Su origen está en una demanda real de fundar
un modesto partido que, como tantas otras cosas, no se llevó a cabo. Para su
definición me acojo a la idea de campañas de Rorty en contraposición con la de
movimiento, de manera que, efectivamente, la esencia será la realización de
campañas políticas que puedan ser secundadas por personas no necesariamente
afines con los postulados ideológicos genéricos del liberalismo.
Ideario liberal
Ahora bien, esas
campañas deberán responder a un ideario liberal y a sus principios ideológicos
a partir de la estrategia de graduación ya expuesta, es decir, que signifique,
respecto a la situación existente, un paso adelante hacia esos principios; un
paso que será mayor o menor dependiendo de la coyuntura y la necesidad de
apoyos, pero que siempre sea un paso hacia la dirección marcada por los
principios ideológicos. De esta manera se une la ética de la responsabilidad y
de la convicción. Esos principios liberales que marcarían la pauta de las
propuestas son dos: el fomento de la responsabilidad individual (hacia los
demás) y el fomento de la capacidad de elección de las personas en aquellas
decisiones que influyan en sus vidas. Responsabilidad en tanto los individuos
deben ser los responsables de sus vidas, si pueden valerse por sí mismos (según
los principios de la seguridad limitada establecidos en el punto 5 De la
política). Capacidad de elección en tanto se fomente la competencia como
estrategia para ampliar el abanico de posibilidades de los individuos a la hora
de tomar sus decisiones en los diferentes ámbitos de sus vidas.
Tipologías de campañas
Además de una
clasificación por ámbitos territoriales (local, nacional o autonómico) o por
ámbitos temáticos (libertades positivas, libertades negativas o servicios
públicos), se podría establecer otra clasificación por campañas de derogación o
de proposición. Derogación de ciertas normativas o actuaciones ya establecidas
contrarias al ideario del partido, ya que existe una auténtica inflación
legislativa fruto del poder que el sistema de partidos actual ha otorgado al
poder legislativo. Proposición de normativas o actuaciones de fomento de los
principios ideológicos expuestos. En este sentido, y de manera coherente por lo
expresado respecto a la existencia de demasiadas leyes en la actualidad, las
campañas propositivas deberán apuntar más a una manera de actuar que a cambios
legislativos propiamente dichos, que sólo deberían ser objeto de campaña en
caso que impidieran llevar a cabo la actuación propuesta. En general, un
partido liberal generador de campañas deberá tener un elemento pedagógico, en
el sentido de hacer patente que lo importante no es el establecimiento de
normas, sino la actuación efectiva sobre la realidad; potenciar la voluntad
activa frente a la coacción de la norma.
Metodología para la
generación de campañas
Cualquier miembro del
partido o simpatizante podrá plantear la iniciativa de una propuesta, que
deberá seguir, para su asunción la metodología que aquí se plantea según las
siguientes fases:
1. Proposición
2. Deliberación
3. definición
4. Valoración
5. Desarrollo
- Fase de proposición:
el objetivo de esta fase es detectar aquellos conflictos sociales reales que
puedan articularse como una campaña. Para detectar esos conflictos que
justifican la acción (toda acción valiosa debe surgen de la existencia de un
problema y la posibilidad de mejorar mediante esa acción, si no se trata de una
posición gratuita) podría recurrirse a espacios de reflexión de diferentes
expertos que proporcionen pistas sobre posibles líneas de trabajo, contactos
desveladores que, presentes en administraciones quieran proponer cambios que
sienten necesarios pero que sus partidos no puedan liderar, o bien a iniciativa
de cualquier persona que quiera promover una campaña.
- Fase de deliberación:
el objetivo de la fase de deliberación es verificar la coherencia entre la
propuesta de campaña y los principios ideológicos. Se trata de una fase
eliminatoria, de manera que si, fruto del debate en el seno del partido, se
valora que una idea no ayuda a fomentar esos principios será descartada como
campaña a llevarse a cabo. El criterio que se establecerá es el de no
contradicción, es decir, que se deberá demostrar que esa campaña es contraria a
los principios liberales en los que se basa el partido. Si no se ha podido
demostrar esa contradicción la propuesta de campaña podrá seguir con su
tramitación. Para llevar a cabo esta fase de deliberación, en la cual se deberá
establecer si la propuesta supera el criterio de contradicción y, por otra
parte, proporcionar ideas para una mejor definición de la misma el partido se
dotará de un espacio deliberativo presencial pero sobretodo de un espacio
virtual y abierto en el cual simpatizantes e interesados (no sólo los militantes)
podrán decir su opinión al respecto en foros, blogs i redes virtuales
establecidos. En este sentido esta fase de deliberación será más rica cuanto
más abierta sea y más participación tenga, por ello se debería recurrir a
personas ajenas al partido e, incluso, de diferentes ideologías para detectar
elementos que permitan una mejor aplicación del criterio de no contradicción.
- Fase de definición:
una vez que la propuesta supere el criterio de no contradicción se deberá
definir sus objetivos y contenidos específicos de la misma. En este sentido una
definición de campaña deberá incluir: objetivos, medios específicos para su
realización (campaña pública, proposición legislativa, etc.), ámbito de
aplicabilidad (local, nacional, autonómico, etc.). Para llevar a cabo esta
definición el partido debería generar un cierto "banco de
conocimiento" consultivo conformado por personas cercanas al partido y
capacitadas en diferentes ámbitos profesionales (prioritariamente en economía,
derecho, politología o periodismo).
- Fase de valoración:
estamos ante la otra fase (junto a la de deliberación) que será eliminatoria a
la hora de juzgar se llevar una campaña a cabo. Su objetivo es valorar si la
propuesta de campaña es viable respecto a los recursos existentes (hay que
recordar que ésta propuesta de partido es real y respondía a un escenario de
gran modestia en los recursos). En este sentido deberá valorarse si hay una
persona (o personas) que se hagan cargo de la misma a nivel global (para lo
cual podrían ser formadas), un mínimo de personas (a valorar según la dimensión
de la campaña) del partido que se comprometan con llevar a cabo esa campaña
específica (en caso contrario quedaría en hibernación hasta ser activada por la
existencia de ese compromiso personal) y recursos financieros suficientes una
vez realizada la valoración de su presupuesto.
- Fase de desarrollo: el
objetivo de esta fase es, una vez, vista la conveniencia y viabilidad de la
campaña, desarrollarla de manera conveniente recopilando la
Estructura de partido
De los diferentes
niveles organizativos:
La finalidad es mantener
al máximo la interlocución del partido con los individuos que lo componen, eliminando
en la medida de lo posible las intermediaciones que generan grupos de poder
internos.
- La interlocución del
partido a nivel nacional es directa con los militantes. La iniciativa es
individual y las agrupaciones regionales únicamente proporcionan cobijo a las
propuestas y difusión en su territorio a las campañas. Esto permite una
interacción para una mayor transferencia de conocimientos y la posible
transposición de las campañas en los diferentes territorios.
- Las potestades de la
organización a nivel nacional son:
* Financiación del
partido y de las campañas
* Gestión de la página
web central, un elemento vital para su gestión.
* Gestión de la
militancia y de la toma de decisiones
* Definición de los
principios ideológicos y sancionar el principio de contradicción en referencia
a las campañas.
* Mostrar el
posicionamiento del partido frente a los temas de actualidad
* Gestionar la
deliberación virtual
* Mantener contactos con
el Banco de conocimiento
- Respecto a nivel
inferior al nacional:
* Se deberá organizar
esos niveles por la existencia de una masa crítica, primero a nivel autonómico
y, si existe esa masa crítica, a nivel local.
* A nivel local se
deberá replicar los elementos a nivel nacional pero para su propio entorno:
espacios de deliberación (grupos de debate), creación de bancos de conocimiento
sobre temas locales, investigación de temas para generar campañas locales que
sean transportables a otros entornos, mantener un blog local y difundir las
campañas del partido en su ámbito.
La página web como
centro de la vida del partido:
La utilización de las
nuevas tecnologías facilitará la democracia interna y, a la vez, la
comunicación con el exterior del partido, su porosidad social. La página web
incorporará:
- Los diferentes blogs
de cada una de las campañas generadas, organizados por ámbitos territoriales y
sectoriales.
- El espacio de
deliberación del partido mediante los diferentes foros donde se plantean las
posibles campañas y se desarrolla el proceso de deliberación.
- Creación de un espacio
de debate multinivel (Blogs, Twitter, Facebook) donde personas (no
necesariamente del partido) debatirán propuestas o sugerencias del mismo. La
posición del partido se plasmaré en un blog que participará al mismo nivel que
los restantes.
- Acceso público a los
presupuestos del partido, publicitando sus ingresos y quienes son aquellos que
aportan recursos y la posibilidad de adjudicar recursos económicos a campañas
concreta por parte de los simpatizantes o afiliados.
- Acceso a las páginas
web locales y agenda de sus actividades.
Financiación
transparente y presupuestos finalistas:
- Financiación
transparente: aportación pública de los afiliados, que aportan una cantidad
voluntaria, entre un mínimo y un máximo predeterminados.
- Financiación finalista:
las aportaciones de los afiliados servirán, primero, para cubrir el
mantenimiento del aplicativo web y la estructura (mínima) general.
-
Respecto a la financiación de las
campañas será el propio afiliado quien pueda escoger a qué campaña se quiere dedicar
su aportación (una vez descontada la aportación a la estructura general).
Los militantes y la toma
de decisiones:
- Militante es aquél que
hace aportaciones económicas al partido de manera continuada, mientras que son
colaboradores aquellos que hacen aportaciones puntuales a alguna de las
campañas. El único derecho de los afiliados respecto a los colaboradores es
votar en las asambleas aquello que sea susceptible de ser votado.
- Respecto a la toma de
decisiones el partido prioriza la iniciativa individual al consenso y la
voluntad de la mayoría. Por esta razón sólo se someterá a votación aquello
imprescindible, como puede ser las listas electorales, los cargos y los
principios ideológicos. El hecho de que los cargos no puedan escoger las
campañas a realizar (sino los militantes que con su esfuerzo humano y económico
deciden que campañas son las que tienen más recursos) limitará mucho su poder
en la organización.
- Las votaciones se
realizarán mediante asambleas virtuales (las nuevas tecnologías lo permiten)
para evitar costes. En estas asambleas se podrá participar por
video-conferencias y se podrá votar mediante un aplicativo que permitirá el
voto a lo largo de un período establecido de tiempo (por ejemplo, 3 horas). El
resultado será de acceso público y se podrá ver el que cada uno de los
militantes (identificados mediante clave) de manera que todos puedan comprobar
si se ha reflejado correctamente el sentido de su voto.
-
Las asambleas serán públicas y los
colaboradores tendrán derecho a la voz.
Participación en los
procesos electorales
La generación de
campañas van generando un corpus que se asemeja mucho a un programa electoral
al uso…pero con la participación de la ciudadanía. Ello es compatible con la
participación en el sistema electoral del partido para defender los contenidos
de esas campañas. Participar en las contiendas electorales, ¿para qué?
- En caso de tener
acceso al poder potenciar las actuaciones por encima de los cambios
legislativos, en concordancia con la creencia que existe una inflación
legislativa en nuestro país.
- Respecto a la
participación en los órganos legislativos fomentar la presencia de personas de
reconocido prestigio en su ámbito profesional en las listas electorales que
quieren comprometerse con una regeneración política. Esto es concordante con la
creencia que no hace falta una excesiva dedicación, dado que los principios
ideológicos definidos por las campañas mancan la pauta a la hora de definir la
actuación en las instituciones. Las asignaciones económicas de los
representantes serán cedidas al partido y éste dedicará estos recursos a apoyar
las causas sociales que decidirán en votación los militantes del partido.
- Más allá de estos
personajes comprometidos, que no se dedicarán profesionalmente a la política,
será necesarios cargos que sí deberán dedicarse profesionalmente al partido.
Para limitar las dificultades de las personas que se dedican a la política y
que tienen dificultades para volver a la vida no política el partido podría
fundar empresas para recolocar a esos cargos una vez dejada su actividad
política.
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